La epopeya industrial vasca
El proceso de industrialización fue el inicio de una etapa determinante en la configuración contemporánea de nuestro país. Desde mediados del siglo XIX Bizkaia y Gipuzkoa, -Araba se incorporó a este proceso mucho más tarde- se embarcaron en una aventura que terminaría por transformar de forma radical todo sobre lo que, hasta entonces, se habían sustentado estos territorios. Mucho antes, Tirso de Molina había definido el ímpetu y capacidad creadora de los vascos con esta frase: “Cortos en palabras, pero en obras largos”. “…en obras largos…” Claro. Es que desde siempre el obrar, el hacer, el crear; en resumen, la industria, ha sido y es nuestro principal motor económico. Un motor que ha traído consigo cambios en la mentalidad de la gente y la transformación urbana y social.
La narración de esta historia requiere de una reflexión sobre lo que fuimos y lo que somos y una reflexión sobre los retos a los que nos venimos enfrentando dese hace ciento cincuenta años.
Siglo y medio de avances industriales, sociales, económicos y empresariales que nos llevan a conocer lo que ha sido y es: “La epopeya industrial vasca”.